En un futuro podríamos ver procesadores implantados en el propio cerebro humano. Esto nos llega de la mano de ARM, la multinacional británica dedicada al diseño de chips. La compañía se ha asociado con el Center of Sensorimotor Neural Engineering (CSNE) de Estados Unidos con el objetivo de embarcarse en un proyecto que pretende desarrollar procesadores que puedan ser implantados en el cerebro humano.
Aquí os dejamos el enlace a la página web oficial.
Esto supondría un enorme avance para la medicina moderna, pues la principal intención de este proyecto es revertir la parálisis en los pacientes con lesiones en el cerebro o en la médula. La intención es que los enfermos puedan volver a recibir retro-alimentación sensorial. Entre otras enfermedades, estos chips harán frente a el Parkinson, el Alzheimer o la parálisis.
Esta tecnología se encuentra todavía en pañales, pero es posible que en un futuro cercano comencemos a ver los primeros resultados.
Además, otras empresas como Facebook están apostando por la interacción con máquinas y el cerebro mediante el proyecto Building 8.
